Guía para abaratar el precio de tu página web, en especial si es la primera
Si has llegado hasta aquí, a ver si acierto… ¿Estás pensando en hacer tu primera web? O quizás llevas un tiempo intentándolo, pero ¿se te ha hecho bola?
¿Lo he acertado?
Pues sigue leyendo. Voy a contarte los factores que influyen en el precio de una página web, los más importantes, y te voy a dar consejos para que te resulte más económica. De manera que puedas desatascar tu bloqueo y publicar tu primera web lo antes posible.
El precio de tu página web: una fiesta de presupuestos
El día que te pongas a pedir presupuestos para diseñar tu primera página web te vas a marear. Y si buscas en Google “diseño web precios” más todavía. ¿Por qué? Porque van a ser muy dispares, unos serán carísimos, otros sospechosamente baratos… ¿Cómo decidir?
No es fácil. Contratar una web es como construir una casa. Hay tantos factores a tener en cuenta que a veces se te van las ganas de meterte en el lío… a mí por lo menos me pasa. Como se pongan a preguntarme qué azulejo quiero para el baño de la habitación de invitados me empiezan a salir sarpullidos…
Liarte la manta al cuello y hacer tú misma tu primera página web también es un buen melón. Incluso si te la hace tu primo, que dice que sabe del tema, se puede montar una buena. Hay que reconocer que hoy en día, existen un montón de herramientas y apps al alcance de todas para hacerlo, y si lo digital y lo estético te ponen, yo te animo a que te metas en el fango y vayas a por ello. Claro que sí, ¡autoconstrucción! Pero con unos conocimientos mínimos 😉
Te lo hagas tú, o se lo contrates a una profesional, necesitas tener claro lo básico para no frustrarte. Y para que la página web te salga más económica.
¡Voy a ello!
¿Cómo es el proceso de construir una web?
Para ponértelo fácil, vamos a compararlo con construir una casa.
¿Cuáles son los pasos para construir tu casa de ensueño?
- Ubicación: buscar dónde vas a construir tu casa
- Proyecto arquitectónico: diseñar cómo va a ser, por fuera y por dentro, porque hay tantos tipos de páginas web como casas
- Cimientos: construir un buen anclaje para que no caiga con la primera tormenta
- Construcción: empezar a poner ladrillos, ventanas, puertas, azulejos…
Si comparamos este proceso con el de crear tu primera web, sería así:
- Ubicación: qué dirección va a tener tu web, la url de tu web
- Proyecto de diseño web: qué va a contener tu web y cómo va a ser
- Cimientos: qué tecnología vas a usar para construirla
- Construcción: montarla, código a código, o módulo a módulo
Cada una de estas fases del desarrollo web tiene sus costes adicionales asociados. Ya sean en euros, o en tiempo que vas a tener que invertir por tu parte. Así que vamos a repasar cada una de ellas y desglosar qué implican, y cómo podemos abaratar costes para crear tu web.
1. UBICACIÓN ¿Cuál va a ser la dirección de tu web?
Toda web necesita una dirección, un nombre: es lo que se llama “dominio” y es lo que se ve en la barra del navegador.
El dominio es como si fuera la escritura de tu casa, de tu propiedad, donde figura la dirección donde está emplazada. Tiene que estar a tu nombre, lo tienes que contratar tú y puedes hacerlo ya mismo porque el precio es ridículo, suele rondar los 10-15 euros al año como mucho.
En inglés se llama domain name. Es lo que ponemos en el navegador después de las tres www. Puedes comprarte el tuyo en empresas como IONOS, Namecheap y muchísimas otras.
Si el nombre que quieres está libre, genial, esta fase va a ser rápida y sencilla.
Si no está libre, aquí ya se complica la cosa… y no sería la primera vez que veo abandonar el proyecto de una nueva web por culpa de no encontrar el nombre ideal. Así que ponte a ello ya mismo, entra en IONOS y haz pruebas, busca opciones y elige el mejor nombre para tu nueva web. Contratarlo es fácil, económico y rápido, con un par de clics lo tienes.
Si no te sale a la primera, vente a esta masterclass donde te explico cómo buscar y elegir el mejor nombre de dominio para tu web. Puedes registrarte desde aquí >
IMPORTANTE
Tú tienes que ser la propietaria de tu dominio, no dejes que nadie lo contrate a su nombre por ti. De esta manera abaratarás el precio de tu página web, pero además nadie te lo podrá robar y evitarás problemas en el futuro.
2. DISEÑO ¿Cómo quieres que sea tu web?
Esta parece la fase más bonita y divertida, ¿no te parece? Es cuando puedes ya empezar a imaginar cómo será tu web, y empezar a tomar decisiones: cuántas habitaciones va a tener, cuantos baños, de qué color serán las paredes, por donde se entrará, con piscina o sin piscina… claro, el precio de la web también subirá o bajará, en función de la complejidad del proyecto, la cantidad de páginas, las funcionalidades…
Ay amiga, pero aquí vienen los grandes bloqueos… He visto muchas webs quedarse en el limbo y nunca ver la luz, después de tener ya contratado y pagado el dominio, e incluso el hosting (del que hablaremos en la siguiente fase).
Los bloqueos más habituales al diseñar tu primera web
Y ¿cuáles son esos bloqueos? Con casi 10 años de experiencia a mis espaldas, creando las primeras webs de mis clientes, tengo detectados los puntos que más frecuentamente frenan un nuevo proyecto web:
- no tienes logotipo
- no tienes colores de tu marca
- no tienes un tipo de letra, tipografía, propio para tu marca
- no sabes qué poner en tu web ni cómo ni dónde
- no tienes los textos escritos de tu web
- no tienes fotos decentes para tu web
¿Te suena algo de esto?
Todas estas pequeñas piezas del puzzle de tu web se pueden convertir en piedras en el camino. Y por supuesto pueden subir el precio de creación de una web.
Lo que pasa es que muchas veces, aprovechamos el momento de diseñar nuestra primera web para poner orden en el negocio y hacer todas las tareas pendientes. Esto puede ser una trampa mortal: no solo encarece el proyecto de diseño web, sino que ¡se eterniza!
Si la web te las vas a diseñar tú, ya te puedes imaginar. Pero si la web te la va a hacer una profesional, lo primero que te va a pedir son todos estos materiales. Sin ellos, no va a apretar ni una tecla. Y si es la propia diseñadora de la web quien se tiene que responsabilizar de crear todos estos materiales, entonces prepárate a triplicar, por lo menos, el presupuesto del proyecto web.
¿Quieres saber qué hacer si te encuentras con uno de estos bloqueos?
Pues apúntate a mi masterclass gratuita en video, en la que te voy a decir como desbloquear cada uno de estos problemas, para que el precio del diseño de la página web resulte más económico:
- qué hacer si no tienes logotipo
- qué hacer si no tienes colores corporativos
- qué hacer si no tienes tipografía corporativa
- qué hacer si no sabes qué poner en tu web
- qué hacer si no quieres escribir los textos de tu web
- qué hacer si no tienes fotos profesionales para tu web
Para cada uno de estos puntos tendrás una solución rápida y eficiente, para que no abandones y consigas publicar tu primera web cuanto antes.
Ten en cuenta que si tu web la va a diseñar un profesional, estos consejos también te servirán para tener preparados todos los materiales y así abaratar el presupuesto de creación de tu web.
3 CIMIENTOS ¿Cómo construir una web sólida y resistente?
Ahora que ya sabemos qué casa queremos construir, toca preparar las bases.
Todas las webs necesitan un espacio en un ordenador conectado a internet las 24 horas, donde se almacenan los archivos con los que está construida la web.
Estos ordenadores se llaman hostings -en español, servidores- porque “sirven” los archivos a internet.
Existen muchas opciones para contratar un hosting, de muchas características y capacidades. Pero lo que quieres tener claro es que para una primera web, básica, sencilla y funcional, tienes dos opciones:
- Contratar una plataforma de construcción de webs, que incluye el hosting en su contrato
- Contratar un servidor compartido en una empresa especializada
A continuación te lo explico en detalle para que lo entiendas mejor.
Plataforma de construcción de webs
Seguro que has oído hablar de Wix. O de Squarespace. Son plataformas y aplicaciones para diseñar webs, que funcionan por suscripción.
Tú les pagas rigurosamente cada mes y ellos te garantizan que tu web esté funcionando en sus servidores. Además, incluido en el precio de suscripción, te facilitan el diseño de la web con plantillas y módulos tipo “drag and drop”, para que sea fácil e intuitivo construirte tú misma la web. Eso sí, ellos no te la hacen, pero te lo facilitan.
Existen cientos, o miles de plataformas de este tipo. Es cuestión de ponerse a probar con cuál te sientes más cómoda. Si quieres una recomendación de mi parte, yo empezaría con Leadpages. Es una plataforma fácil de usar y muy intuitiva, que además tiene sus plantillas muy bien adaptadas a móviles. Aprovecha sus ofertas de Black Friday para contratarla, que suele tener muy buena rebaja 😉
En mi masterclass hablo de otras plataformas, para que puedas investigar la que mejor se adapte a ti. Aquí puedes verla, es gratis >
IMPORTANTE
Ten en cuenta que si algún día quieres cambiar de casa, no te vas a poder llevar ni los muebles. Se lo quedan todo, tendrás que volver a construir tu web desde cero allá donde quieras mudarte.
Servidor compartido en una empresa especializada
La otra opción que tienes es contratar un “hosting compartido” en una empresa especializada. Este servicio también es de pago, mensual o anual.
Técnicamente, estas empresas te alquilan una cantidad de espacio en sus discos duros para que metas los archivos de tu web, junto con las de otras webs de otros clientes (por eso se llama “compartido”), y te garantizan que estarán disponibles en internet, para que tu página web se vea desde cualquier lugar del mundo en todo momento.
A nivel práctico, también suelen facilitar la instalación de Wordpress para diseñar tu web. Pero luego ya del tipo de diseño, las plantillas, el montaje, la seguridad, la velocidad y todo lo demás te encargas tú. No te dan nada hecho.
Si me preguntas a mí, yo siempre recomiendo la empresa Raiola, española, para contratar tu hosting. Están especializados en wordpress, y para una primera web básica solo necesitarás su paquete más económico, que ronda los 80€ al año.
IMPORTANTE
Tú tienes que ser la propietaria de tu hosting, no dejes que nadie lo contrate a su nombre por ti. De esta manera el precio de tu página web será más económico, y tendrás siempre el control de tu web.
Pero, ¿qué es Wordpress?
El 43% de las webs de todo el mundo están construidas con Wordpress. Es una cifra llamativa, ¡por lo menos!
Wordpress es un “constructor web”, podríamos decir que es como el cemento de las webs. El material de construcción más popular. Es lo que le da estructura y funcionalidad a tu web, y lo que te permite decidir cuántas habitaciones tiene tu casa y de qué color pintarás cada pared. Además, te lo hace con vistas a que en el futuro a lo mejor tu familia crece y necesitarás una casa más grande, más amplia y más cómoda.
“Wordpress crece contigo” sería un buen slogan para sus campañas de publicidad.
Wordpress se ha popularizado porque permite construir webs de manera visual, sin tener conocimientos de programación, y además es gratuito, con lo que el precio de tu página web sale más económico. Muchas agencias de diseño web desarrollan las páginas web profesionales de sus clientes con Wordpress. Pero que no te engañen, Wordpress es una herramienta compleja. Hay que tener cierto nivel de conocimientos técnicos para usarla correctamente y conseguir diseñar una web funcional. Así que, si lo técnico te da miedo, no te aconsejo que montes tu web en Wordpress, hazlo mejor con una plataforma de las que hemos hablado antes.
¿Damos un repaso a lo que hemos visto hasta ahora?
Brevemente, los pasos previos a montar tu primera página web, que te permitirán abaratar costes e ir más rápido, son:
- Contratar tu dominio a tu nombre. Cuesta entre 10 y 15€ al año.
- Proyectar el diseño de tu web. Lleva pensado qué vas a poner en tu web, cómo y dónde. Mírate mi masterclass gratuita para evitar los bloqueos más frecuentes en esta fase.
- Contratar el servidor. Decide si vas a montar la web en una plataforma o en un servidor compartido con Wordpress y contrátalo a tu nombre.
4. CONSTRUCCIÓN ¿Cuál es el último paso?
Pues sí, efectivamente amiga. Llegó el momento de arremangarse, coger la paleta y empezar a poner ladrillos. Hay que ponerse manos a la obra y levantar la web.
Si te vas a poner tú misma, mucho ánimo. La autoconstrucción de tu propia casita puede ser una fuente de grandes satisfacciones. Eso sí, hazte a la idea de que vas a verte muchos tutoriales en youtube. Pero se puede, ¡claro que sí!
Y si vas a encargar el diseño de tu web a una profesional, pues enhorabuena. Porque si llegas con todas las tareas que hemos comentado aquí ya hechas, el precio de tu página web va a ser mucho más económico, y además, tu web va a estar lista muy pronto. ¡Sí!
BONUS ¡Espera! se nos olvida algo importante
Pues sí. Hay dos puntos muy importantes, que a las madres primerizas de una web se les suele olvidar con mucha frecuencia. Son fundamentales para que tu web genere confianza cuando alguien la vea, pero también ¡para evitar multas!
Vente a mi masterclass gratuita y te digo cuáles son estos dos puntos, que todo el mundo olvida, y cómo implementarlos correctamente para lanzar tu primera web mejor que nadie. ¡Seguimos en el video!
PS: por cierto, del mantenimiento web, como del mantenimiento de una casa, ya hablamos otro día 😉